¿Cómo se hace...? El esmalte a fuego:)

 

    El esmalte al fuego es una técnica milenaria que consiste en calentar figuras de cobre, plata y oro cubiertas de esmaltes vitrificables a temperaturas superiores a los 780ºC, proceso delicado y totalmente artesanal....    etc...etc...etc...

    Hasta aquí la descripción oficial cortita de la manualidad de hacer esmalte al fuego. Suena muy serio y puede asustar un poco...Tan difícil sería hacer esmalte al fuego? Noooooo..... Es bastante fácil, sólo se requiere un poquito de maña y fantasía. Y justamente para que no os sea abrumador, os voy a explicar paso a paso cómo hacerlo. Así, ¡espero que tengáis más ganas de probarlo en mi taller!!

    Bueno, primero el cobre: menos mal que la temperatura de fundición del cobre es 1082 Cº... porque nuestra manualidad requiere hornear la pieza en 860 Cº! Para esto utilizo un horno de microfibra con cúpula que hay meter en el microondas y que reúne las micro ondas (las micro ondas del microondas jiji) y se calienta a 860 Cº. 

    Primero como he dicho, la base de cobre. Cogemos la figurita del cobre o si tenemos sierra para cortar la lámina de cobre, podemos diseñar nosotros mismos una figura, dibujarla en la lámina y luego cortarla, pero eso ya es un poco más laborioso . Luego lo lijamos para que la pintura se pegue más fácilmente.

    Después de lijar, lo limpiamos con alcohol para quitarle la grasa y el polvo. 

    Ahora ya tenemos la base limpia, lista para pintarla!

    Primero se pone el contraesmalte... o sea, en la cara posterior de la base de la que vamos a adornar, para que cuando horneemos, el peso de las dos caras sea igual. Lo dejamos secar (eso se seca rápidamente, encima del radiador o de alguna superficie caliente antes!)  El contraesmalte es como un polvo gris diluido en agua.  

    Cuando se haya secado ya el contraesmalte, le damos la vuelta a nuestra figura y.... a pintar! mejor dicho no es pintar-pintar sino más pinter extender el esmalte en la superficie de la figurita. El esmalte prácticamente es polvo de cristal diluido en agua, con un poco de "tragacanta" que hace que se peguen los minicristalitos en el agua. (no que se peleen sino que no se separen...:)  

    Al terminar de pintar, podemos adornar con abalorios estilo millefiori o con abalorios más simples.

    Una vez acabada la faena , metemos nuestra figurita (que luego se convertirá en medalla, pendiente, broche, anillo o algún otro adorno) en el horno y el horno en el microondas y ...a .esperar! Pasados unos 6-7 minutos, le podemos echar un vistazo, utilizando  siempre guantes super gordos para levantar la cúpula porque dentro del horno hacen más 800 Cº! Y veremos...¿qué veremos?... pues prácticamente nada, quiero decir, todo rojo-rojo, como la lava de un volcán. Lo único que podremos distinguir es que si los abalorios de cristal se han fundido ya o no. Para conseguir esto hay que hornear más o menos durante 11-12 minutos. Si están fundidos ya, enseguida hay que apagar el microondas! (porque si no, se nos quema la gran obra).

    En mi caso hay que esperar mínimo 10 minutos para poder sacar las piezas del horno con mucho cuidado porque siguen estando muy calientes, y ponerlos encima de algún ladrillo para que se vayan enfriando. En pocos minutos el color rojo del esmalte al enfriarse se convierte en colores brillantes!  

 

    Una cosita, sólo un comentario: yo utilizo este horno simplemente porque un horno de verdad cuesta un huevo... el precio ronda alrededor de los 800 euros...y yo como todavía no hago muchísimos talleres, no me lo puedo permitir, no me compensa. Esto no os lo digo para dar pena...(uy "pobrecitanotienelehornofantásticomaravilloso") sino simplemente para que sepáis que en mis talleres trabajaremos con este tipo de horno que requiere un poquito más de tiempo. Cuando ya tenga que hacer cada día dos o tres mil talleres, me lo voy a comprar. ¡Prometido!

    Bueno, por dónde íbamos... a ver... pues, ¡ya está! Una vez lista nuestra pieza, podemos utilizarla cómo quieramos (bueno, dependiendo del tamaño y la forma, claro:). Se la puede pegar en un broche o en anillo, pendiente, o incluso se puede utilizar como imán para el frigorífico... bueno, muchas-muchas cosas más...